Asociación Urantia de España
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Luz y Vida – diciembre 2022

In This Issue

Editorial – diciembre 2022

M. José Sánchez Santamaría

La sabiduría se postra ante la fragilidad

Editorial dic 2022-1«Esta es la historia de un joven que no podía dormir casi nunca, puesto que un fantasma se le aparecía en sueños y le angustiaba revelándole todos los secretos más íntimos que él albergaba. Así le demostraba que lo sabía todo acerca de él.

»El joven estaba desesperado, hasta el punto que llegó a detestar el momento de acostarse, pese al cansancio acumulado. Había visitado doctores y psicólogos, había confesado su problema a amigos, lo había intentado todo, pero sin resultados: el fantasma seguía presentándose cada noche y le recordaba todos los rincones más íntimos y dolorosos.

»Ya al borde de un colapso nervioso, decidió pedir auxilio a un célebre maestro zen. Tras haberle explicado el dilema, el joven añadió: “ese fantasma lo sabe todo, absolutamente todo acerca de mí, ¡incluso conoce mis pensamientos! No puedo sustraerme a su dominio”.

»El maestro pensó que la solución no estaba fuera del alcance del chico y le sugirió que hiciera un trato con el fantasma. “Esta noche, antes de acostarte, coge un puñado de lentejas al azar y no las sueltes. Luego acuéstate y espera. Cuando el fantasma se presente, proponle un trato. Dile que, si adivina cuántas lentejas tienes en la mano, será para siempre tu dueño y que, si no lo adivina, deberá desaparecer para siempre. Vamos a ver qué pasa”.

»El chico procedió del modo que le aconsejó el maestro. Poco después de acostarse el fantasma apareció y le dijo: “Sé que intentas librarte de mí. También sé que te has ido a ver aquel bobo del monje zen para que te ayude a echarme, pero tus esfuerzos no te servirán para nada”.

»”Bueno”, respondió el joven, “ya sabía que me habrías descubierto, así como supongo que indudablemente sabrás cuántas lentejas tengo en el puño“. Se hizo el silencio.

»El fantasma desapareció para no volver nunca más. Lo que no sabía el chico no lo podía saber su fantasma.»

Me encanta esta breve historia porque la metáfora del fantasma nos ayuda muchísimo a entender el poder que tiene nuestra mente, nuestros pensamientos y, sobre todo, nuestros miedos. Cómo nos podemos ahogar en un mar de emociones y de pensamientos recurrentes, repetitivos y agotadores. Pensamientos y emociones que, por su naturaleza muy cercana a la animal, no tendrán un desarrollo espiritual más allá de este mundo material. ¡Qué frágiles somos!

Todos nos podemos reconocer en situaciones en las cuales la mente nos hace pasar un mal momento y no nos sentimos orgullosos del resultado. ¿Quién no ha sufrido de insomnio antes de un examen importante? ¿Acaso no hemos tenido discusiones y peleas con nuestros padres o hermanos, con el consabido malestar que esto ocasiona en la convivencia? ¿Y qué decir de un padre o madre que se siente desbordado o avergonzado por un berrinche de su hijo o hija? Situaciones estresantes, en fin, que son corrientes en la vida material y temporal aquí en la Tierra.

Frente a esta realidad, nos llega a nuestro planeta hace más de dos mil años un ser que nos plantea un discurso y un estilo de vida sorprendente, que rompe paradigmas centenarios, milenarios, de pensamiento. Nos libera de esta recurrencia en el sufrimiento, nos salva de nosotros mismos, apostando por el Amor:

Editorial dic 22-2188:4.7 (2017.2) Aunque no es acertado considerar a Jesús como víctima sacrificial, como rescatador o como redentor, sí lo es, y mucho, referirse a él como salvador. Hizo que el camino de la salvación (de la supervivencia) fuera para siempre más cierto y más claro. Mostró de una forma mejor y más segura el camino de la salvación a todos los mortales de todos los mundos del universo de Nebadon.

El libro de Urantia precisa todavía más:

188:4.9 (2017.4) Todo este concepto de expiación y salvación mediante el sacrificio radica y se fundamenta en el egoísmo. Jesús enseñó que el servicio a nuestro prójimo es el concepto más alto de la hermandad de los creyentes en el espíritu. Los que creen en la paternidad de Dios deberían dar por sentada la salvación. La preocupación principal del creyente no debería ser la búsqueda egoísta de su propia salvación personal, sino más bien el impulso desinteresado de amar y servir a sus semejantes como Jesús amó y sirvió a los hombres mortales.

188:4.13 (2017.8) … La salvación humana es real y está basada en dos realidades que las criaturas pueden captar por la fe e incorporar así a su experiencia humana individual: el hecho de la paternidad de Dios y su verdad correlacionada, la hermandad de los hombres.

Es sorprendente que Alguien nos informe de que estamos aquí, sobre la Tierra, por Amor, por pura bondad de un Padre que nos ha pensado y llevado a la existencia. Es maravilloso que nos expliquen lo que ya intuíamos: todos los seres humanos tenemos un mismo origen, tenemos lazos que nos unen y hermanan, por lo que nos podríamos sentir acompañados, acogidos y hermanados con todos los habitantes de Urantia, nuestros afines. Nadie es realmente un extraño sino un compañero de viaje, aunque algunos compañeros nos resulten reprensibles y lejanos. En ellos, precisamente, está el reto de vislumbrar también la mano divina de su origen, de sobreponernos a la animadversión, odio, rencor o envidia que nos suscitan. ¿Podremos llegar a una altura espiritual como la que nos demostró en su vida Jesús de Nazaret, nuestro Creador y Hermano?

188:5.2 (2018.1) La cruz muestra para siempre que la actitud de Jesús hacia los pecadores no era ni de condena ni de condonación sino más bien de salvación eterna y por amor. Jesús es un verdadero salvador porque su vida y su muerte atraen a los hombres hacia la bondad y la justa supervivencia. Jesús ama tanto a los hombres que su amor despierta una respuesta de amor en el corazón humano. El amor es realmente contagioso y eternamente creativo. La muerte de Jesús en la cruz representa un amor tan fuerte y tan divino como para perdonar el pecado y absorber toda maldad.

188:5.6 (2018.5) Todo el triunfo de la muerte en la cruz está resumido en el espíritu de la actitud de Jesús hacia sus verdugos. Hizo de la cruz un símbolo eterno del triunfo del amor sobre el odio y de la victoria de la verdad sobre el mal cuando oró diciendo: «Padre, perdónalos porque no saben lo que hacen». Esta entrega de amor se contagió a todo un inmenso universo; los discípulos se contagiaron de su Maestro. El primer maestro de su evangelio que fue llamado a dar la vida por él dijo mientras lo lapidaban: «No les tomes en cuenta este pecado».

188:5.7 (2018.6) La cruz hace una apelación suprema a lo mejor que hay en el hombre porque nos muestra a aquel que estuvo dispuesto a entregar la vida por sus semejantes. Nadie puede tener mayor amor que quien da la vida por sus amigos, pero tal era el amor de Jesús que estaba dispuesto a dar la vida por sus enemigos. Ese era el amor más grande que se había visto nunca en la tierra.

Esa pequeña reflexión acerca de nuestro Padre Creador y, por supuesto, Salvador, y su forma de comportarse tan deslumbrante y sorprendente viene a colación de la celebración de las próximas fiestas navideñas. Una excusa social que nos puede ayudar a refrescar a los lectores de El libro de Urantia el hecho de que nos viene a nacer un ser maravilloso, un ser que disfrutará como nosotros de alegrías y sufrimientos, que será frágil pero también extraordinariamente poderoso y, sobre todo, un ser imbuido de Amor en su comportamiento.

Ahora, en estas navidades, se nos abre una ventana de reflexión. Un momento de cierre y recapitulación. No dejemos pasar el oro bruto de una experiencia intensa de 365 días ya pasados. Que no se marche el 2022 sin que lo repasemos y recapitulemos de forma pormenorizada. Las situaciones límites se acercan para medirnos.  El año que ya expira nos ha graduado como pocos. Ha cuestionado nuestra salud física, pero sobre todo nuestra salud mental, emocional y espiritual.

El libro de Urantia nos puede ayudar a ello. Veamos una anécdota de su nacimiento en la Tierra:

Editorial dic 22-3122:8.6 (1352.2) Un extraño maestro religioso de Mesopotamia comunicó tiempo atrás a estos sacerdotes de su país que le había sido revelado en sueños que la «luz de vida» estaba a punto de aparecer en la tierra como niño recién nacido entre los judíos. Y allá fueron los tres maestros buscando esa «luz de vida». Después de buscarla inútilmente por todo Jerusalén durante varias semanas, estaban a punto de regresar a Ur cuando se encontraron con Zacarías. Tras manifestarles su convicción de que Jesús era el niño a quien buscaban, Zacarías los envió a Belén donde encontraron al bebé y dejaron sus regalos en manos de María, su madre en la tierra.

¿Qué podemos extraer de esta conocida historia? Estos sacerdotes, estos «magos», representan la búsqueda espiritual de todos los pueblos. Son unos paganos, no unos judíos, los que muestran la incesante búsqueda de la Verdad que muchos deseamos encontrar.

¿Imaginamos un poco cómo transcurrió aquella situación? En cuanto están ante el Niño, los «magos» de oriente lo reconocen y exclaman: ¡Maravilla de maravillas! Y caen de hinojos, rendidos ante la evidencia. Para ellos, no hay duda de que por fin han encontrado lo que con tanta ansia buscaban. Pero ¿qué era esa maravilla? ¿Por qué se ponen de rodillas?

En ese encuentro vemos cómo la Sabiduría se postra ante la Fragilidad y reconoce que solo ahí está la «luz de la vida». Estos sacerdotes no son meros intelectuales que buscan comprender; son sabios, es decir, personas que saben ver y recibir. Son receptivos, permeables; por eso los podemos calificar de sabios. Están abiertos a la vida.

Revestimos la iluminación de tanta solemnidad y grandilocuencia que apenas resulta creíble que suceda ante la visión de algo tan pequeño y cotidiano como un niño recién nacido. Un niño parece pequeño, ¿no? Pues la iluminación puede acontecer gracias a realidades aún más pequeñas: una gota que cae del grifo, por ejemplo, un abrir y cerrar de ojos, una llamada de teléfono…

Estos tres sacerdotes eran hombres de conocimiento, por eso lo entendieron todo enseguida. Porque la iluminación no la da el poder, sino el conocimiento, el co-nacimiento: nacer con lo que tenemos delante, nacer siempre a nosotros mismos ante cualquier realidad. Así que una vida consagrada por entero al estudio y a la investigación culminaba para ellos en aquel instante. Todo el misterio insondable sobre el que tanto habían leído y conversado se condensaba ahora, en una pequeña casita de Belén, ante un bebé. Todo estaba y está en el amor de un hombre y una mujer. Ese era el verdadero templo: una mujer, un hombre y su niño, el misterio de la familia.

La vida siempre está ahí, aunque pocas veces la reconocemos. La vida estaba palpitante: José emocionado con su primogénito; María sorprendida y plena de amor por su hijo; el Niño, como todos los bebés, moviéndose sin parar, descubriendo el milagro de estar vivo en un cuerpo.

Esta hermosa estampa de una familia, que reconocemos todas las navidades, ¿nos conmueve como aquellos tres sacerdotes que caminaron desde Ur y no cejaron hasta encontrar su objeto de búsqueda? ¿Dejamos escapar la vida sin extraer la enseñanza del valor incalculable que tiene la fragilidad en la que vivimos? Pues la esperanza de la «luz de la vida» nos viene, se acerca a nosotros en nuestra cotidianidad y nos quiere deslumbrar para dejarnos postrados ante la Vida.

Es el deseo de la Asociación Urantia de España que en el 2023 podamos tocar una nota más alta en la melodía de la vida, rasgar un «do» más sublime. El nuevo año, ojalá nos acerque más a la «luz de la vida», a descubrir incalculables tesoros en nuestro día a día, en nuestras fragilidades. Cuanto menos vamos a por ello…

Feliz y provechosa lectura de nuestro boletín.

Feliz Navidad.

Feliz Año 2023.Editorial dic 22-4

Trabajos – nuestras recomendaciones del mes

MonmatiaLos cuerpos espaciales de Monmatia (Craig Carmichael)

En El libro de Urantia, se dice que Monmatia (nuestro sistema solar) tiene doce planetas, algo que nuestros astrónomos todavía no han reconocido. Después de repasar lo que se entiende por planeta y de la controversia que ha rodeado a Plutón (sobre si se puede considerar un planeta o no), parece que los astrónomos están dispuestos a reconocer que puede haber más planetas en nuestro sistema solar. Como señala el autor: «Los “doce planetas” que describen las revelaciones ya no parecen una cifra tan loca si consideramos el cinturón de asteroides como un planeta fallido, y si consideramos la posibilidad de otros planetas más allá de Neptuno, incluso descartando a Plutón como planeta. La cuenta actual podría estar en diez, y subiendo».


Otorgamientos de MiguelLos otorgamientos de Cristo Miguel (Javier Martínez)

Aquí tenemos un esquema en forma de tabla donde aparecen las características más destacadas de los siete otorgamientos que llevó a cabo Miguel de Nebadon, nuestro Hijo Creador, tales como: el momento del tiempo en el que se produjeron, el lugar, la duración, el tipo de ser en el que se otorgó, quién o quiénes se enteraron del otorgamiento, el puesto desempeñado, a qué voluntad se sometió, etc. Resulta muy útil para tener una visión de conjunto sobre los otorgamientos, y también para percibir las diferencias entre ellos.


De la tribu a la ciudadanía cósmicaDe la tribu a la ciudadanía cósmica (Olga López)

Este es el texto de una presentación que se dio durante la Urantiatón del 28 de noviembre de 2020, y que comienza así: «En El libro de Urantia aparece varias veces la expresión ciudadanía cósmica o ciudadanos cósmicos. Otra de las expresiones que va relacionada a la ciudadanía cósmica es sin duda la de consciencia cósmica. Leemos y entendemos lo que significan esas palabras por separado, pero ¿a qué se refieren exactamente cuando van juntas?». A partir de esta pregunta, la autora desarrolla un vínculo entre ciudadanía y consciencia cósmica, a la luz de las enseñanzas de El libro de Urantia.


Presentación del LUEstudio en profundidad del LU en los grupos de estudio (Georges Michelson-Dupont)

En esta presentación, el fideicomisario y vicepresidente internacional de la Fundación Urantia, Georges Michelson Dupont, comparte su extensa experiencia como anfitrión de grupos de estudio y facilitador de seminarios, todos ellos basados en la pedagogía que despliegan los reveladores en El libro de Urantia. También propone ejemplos prácticos y recomendaciones para que el grupo se desarrolle de manera eficaz y fomente la participación de sus miembros.

 


 

Historia y enseñanzas – Crónica de la vida de Jesús

Los doce apóstolesRELATO PERIODÍSTICO DE LA VIDA Y ENSEÑANZAS DE JESÚS SEGÚN EL LIBRO DE URANTIA

Os presentamos la siguiente entrega de las crónicas de la vida de Jesús, que en esta ocasión contiene lo que nos cuentan los reveladores en el documento 139 (Los doce apóstoles). Dentro del PDF veréis un botón desde donde acceder al texto del documento desde el sitio web de la Fundación Urantia.

Resumen del documento 139

Guía de El libro de Urantia para niños: Jesús a los nueve años

Jesús a los nueve años

Continuamos repasando el trabajo secundario Una guía infantil hacia El libro de Urantia, de Mary Livingston. Este es el siguiente capítulo, dedicado a la época en la que Jesús tenía nueve años, y comienza así:

«Nació la segunda hermana de Jesús. La llamaron Marta. Los hijos de José y María eran seis, así: Jesús, Santiago, Miriam, José, Simón y Marta. La casa constaba de una sola pieza grande. Pero José construyó otra pieza junto a la casa. Ese cuarto servía de taller durante el día y de dormitorio durante la noche. Fabricó también un pequeño banco de carpintería para Jesús. Por primera vez Jesús contaba con herramientas propias. Con frecuencia trabajaba en el banco y llegó a ser muy hábil en la fabricación de yugos para animales.»

Descarga del capítulo completo en formato PDF

Otros libros de crecimiento espiritual

Conversaciones en la otra orillaConversaciones en la otra orilla con el viejo profesor (Florencio Bao)

Este libro contiene una serie de diálogos agrupados por temas entre el «viejo profesor» (Enrique Tierno-Galván) y el autor del libro, amigo y colega suyo, que firma por cierto con pseudónimo. Hasta aquí todo parece normal, si no fuera porque las conversaciones tuvieron lugar días después del fallecimiento de Tierno-Galván. Esto es, cuando se llevaron a cabo este se encontraba en la antesala de la otra vida. El libro es presentado como un «diálogo-ficción», dejando al lector la última palabra sobre su posible realidad. Lo que se dice en este libro es enormemente interesante, y se complementa de alguna forma con las enseñanzas de El libro de Urantia.

Ver la reseña completa en nuestra página web


El evangelio y los santos de las grandes religionesEl Evangelio y los santos de las grandes religiones, de Miguel Ruiz de Ayúcar

Este libro contiene una serie de diálogos agrupados por temas entre el «viejo profesor» (Enrique Tierno-Galván) y el autor del libro, amigo y colega suyo, que firma por cierto con pseudónimo. Hasta aquí todo parece normal, si no fuera porque las conversaciones tuvieron lugar días después del fallecimiento de Tierno-Galván. Esto es, cuando se llevaron a cabo este se encontraba en la antesala de la otra vida. El libro es presentado como un «diálogo-ficción», dejando al lector la última palabra sobre su posible realidad. Lo que se dice en este libro es enormemente interesante, y se complementa de alguna forma con las enseñanzas de El libro de Urantia.

Ver la reseña completa en nuestra página web

Vídeo – nuestra recomendación del mes

Ágora Nostra - La religión personal

Ágora Nostra: La religión personal (Asociación Urantia de España)

Este vídeo fue el primero de una corta serie en la que se trataron temas de El libro de Urantia en una conversación guiada por un moderador. En este caso en concreto la conversación giró sobre la religión personal, un concepto que marca la diferencia en El libro de Urantia respecto a otras religiones y doctrinas. Frente a la religión de la autoridad eclesiástica, característico de las religiones evolutivas, el libro aboga por la religión como experiencia personal con Dios, que además es nuestro Padre celestial y alguien con el que podemos tener una relación como ser con personalidad.

Navegando por la vida – La paz

La pazSomos los arquitectos constructores de lo que sucede en nuestra vida, si estamos en paz con nosotros y con la vida crearemos un presente y un futuro más fácil de gestionar.

Hay que dejar ir el juicio y la crítica a los demás, las acciones ajenas no tienen nada que ver con nosotros, no las podemos cambiar, solo respetar y aceptar y llenarnos de amor y paz.

No importa que las circunstancias sean difíciles y todo parezca un caos en la superficie, en lo más profundo de nuestro ser podemos encontrar las respuestas.

Mantener nuestra paz interior siempre nos conducirá a encontrar la guía y poder reconocer las señales para afrontar cualquier situación que estemos viviendo.

RECUERDA: con paz arreglo toda situación.

En algunos momentos de la vida nos encontramos situaciones difíciles y dolorosas que incluso nos cogen por sorpresa, nos debilitan y nos hacen dudar.

Cuando eso sucede es cuando más hemos de llenarnos de paz y de confianza, en nosotros mismos y en nuestra vida.

Las dificultades nos hacen fuertes, nos sacan de la zona de confort y nos obligan a volvernos más pacientes, creativos y amorosos.

No hay dificultad, enfermedad o tragedia que no se pueda vencer con suficiente paz y amor. No hay puerta que el amor y la paz no consigan abrir.

RECUERDA: ¡con paz se superan todas las dificultades!

(Assumpció Salat i Bertran)

Mi párrafo favorito

David Carrera

Mi parrafo favorito - dic 202276:6.4… El pueblo hace la civilización; la civilización no hace al pueblo.

En esta era de demagogia y cursilería, donde se nos machaca insistentemente con el dogma de que todos somos iguales en todos los sentidos, párrafos como este suponen un bofetón bien dado a nuestras consciencias.

Una de las conclusiones inmediatas de esta verdad es que, si el pueblo cambia, también cambia la civilización. Y aceptar esta verdad supondría comprender la justificación que hay detrás de que un enorme segmento de la población sea reticente a aceptar sin rechistar las invasiones migratorias desordenadas o las políticas demográficas anárquicas.

Si ya estamos condenados, disfrutemos al menos del espectáculo.

Reflexiones urantianas

Luis García Bory

Reflexiones urantianas - dic 2022Un análisis de parte de la información disponible sobre los principales acontecimientos de los últimos dos mil años aproximadamente, desde el otorgamiento de Miguel de Nebadon, sugiere que el planeta sigue estancado espiritualmente. Incluso cuando al mismo tiempo disfrutamos de niveles de progreso y estabilidad planetaria sin precedentes.

Esta parece haber sido la razón misma por la que la quinta revelación de época, El libro de Urantia, fue promulgada como una medida de emergencia que siguió a muchas otras medidas de emergencia posteriores a la rebelión aplicadas para apoyar a los pueblos de Urantia. El estado de nuestro planeta, tal y como lo mencionaron los reveladores en sus mensajes de hace unos 100 años (si el proceso de revelación comenzó a principios del siglo XX, como algunos especulan), no podía ser más aleccionador.

Este párrafo del documento 114 habla, en efecto, de una configuración de gobierno planetario bastante extraordinaria en respuesta a nuestra peculiar historia reciente (además de la rebelión, el único éxito parcial de las cuatro revelaciones de época anteriores):

La administración que existe en Urantia es francamente difícil de describir. No tiene un gobierno formal según el esquema organizativo del universo, con separación de los departamentos legislativo, ejecutivo y judicial. Los veinticuatro consejeros son lo más parecido a la rama legislativa del gobierno planetario. El gobernador general es un jefe ejecutivo provisional y consultivo, limitado por el poder de veto del observador Altísimo. Y no hay ningún poder judicial con autoridad absoluta en el planeta, solo comisiones de conciliación. 114:5.1 (1254.1)

El mismo documento nos recuerda lo siguiente:

Este gobierno planetario de organización bastante imprecisa y administración un tanto personal es más eficaz de lo esperado gracias al ahorro de tiempo que supone la asistencia de los arcángeles, cuyo circuito siempre operativo se utiliza con frecuencia en las emergencias planetarias y las dificultades administrativas. El planeta sigue estando aislado espiritualmente de los circuitos de Norlatiadek, pero ahora se puede sortear este impedimento en caso de emergencia utilizando el circuito de los arcángeles. Por otra parte, el aislamiento planetario afecta poco a los mortales individuales desde que se derramara el Espíritu de la Verdad sobre toda carne hace mil novecientos años. 114:5.4 (1254.4)

Además del maravilloso servicio de los arcángeles, tenemos, por supuesto, los bastante efectivos cuerpos ciudadanos permanentes de apoyo en el cuerpo de leales intermedios planetarios, y finalmente nos puede animar el hecho de que el Espíritu de la Verdad de nuestro Hijo Maestro está trabajando activamente junto con el Espíritu Santo de nuestra Hija Creativa y nuestros Ajustadores del Pensamiento, para ayudar a que nuestro nivel de consciencia de Dios continúe aumentando y nos lleve hacia adelante espiritualmente.

En mi opinión, el servicio más importante que podemos ofrecer a nuestro planeta es, para empezar, los modestos cambios diarios en nuestros propios hábitos y comportamientos: una práctica diaria de meditación de adoración y oración que nos prepare para un servicio sinceramente amoroso y desinteresado. Una persona más cada día, empezando por nosotros mismos. Gestionar mejor nuestro miedo, ira, envidia, celos e impaciencia. Encontrar formas cada vez más amables y tolerantes de relacionarnos con los demás y con la naturaleza. Trabajar para producir más de lo que usamos, desperdiciar menos y ser más sabios económicamente en nuestro uso de la energía y los recursos vivos. Elegir mejor la forma de relacionarnos con los alimentos, las bebidas y otros productos de consumo. Acumular menos, compartir más (incluyendo nuestro propio tiempo y recursos) y asumir una mayor y mejor responsabilidad por nuestros hogares, familias y comunidades directas. Remediar los rencores del pasado, desenredar y aliviar las relaciones disfuncionales o carentes de amor, y reconciliarnos con aquellos a quienes herimos o causamos tensión, pena o sufrimiento.

No todo lo anterior nos resulta fácil, pero el propio camino de la vida y el amor está ahí para recorrerlo.

Cuestionario urantiano: Christian Figueroa

Christian FigueroaSoy Christian Figueroa Colón, estudiante universitario en administración de sistemas de oficina, soltero, vivo en Puerto Rico. Colaboro en Radio Urantia y Urantia TV.

  1. ¿Cómo llegaste hasta El libro de Urantia y por qué crees que lo encontraste?

Siendo cristiano, mi curiosidad por mirar fuera del canon me llevo a leer diferentes libros extrabíblicos o apócrifos, que finalmente me llevaron a encontrar por «casualidad» El libro de Urantia (primero en una búsqueda en la playstore sobre El libro de Enoc y luego buscando cosas bíblicas en Google). Las dos primeras veces que lo encontré tenía una especie de visión negativa: creía que era obra de Satán (me negaba a leerlo), pero con el tiempo después de haber agotado todo lo que podía encontrar respecto al universo bíblico y apócrifo, me decidí a leerlo. Creo que llegó en el momento justo cuando también estaba dudando de ciertas cosas de la Biblia, en esos últimos meses me decía a mí mismo que cómo era posible que la realidad se redujera a la Biblia (y me preguntaba cómo el Dios infinito eran tan limitado y diferente en los testamentos bíblicos). Me decía que debía haber más, que debía haber una verdad mayor que no conocía, y ese vacío insaciable fue llenado con El libro de Urantia, que logro responderme todas esas dudas y confusiones. Finalmente encontré esa verdad que mi ser anhelaba e intuía que debía haber.

  1. ¿Cuál fue tu primera impresión al leerlo?

La primera vez que lo leí un poco al azar fue en calidad de un creyente hostil (había caído en el documento de Juan el Bautista). Me decía que esto debía ser obra del mal, un texto new age, un texto hecho para competir con la Biblia, pero cuando me decidí a leerlo con otra mentalidad unos meses después, ahí fue que mi mente hizo «boom», toda esa muralla limitante y opresiva de ideas primitivas cayó y vi una enorme e inmensa realidad, un Dios realmente eterno e infinito, y a la vez tan cálido y cercano. Finalmente encontré el descanso después de largos conflictos internos.

  1. ¿En qué punto de la lectura (documento, frase, etc.) aceptaste que El libro de Urantia es realmente lo que dice ser?

Al principio lo leí como cualquier otro libro apócrifo (maravillado, pero no con aceptación total), pero a medida que veía cómo estas ideas tenían coherencia y eran cosas que había intuido, o que eran ciertas y me había negado a creerlas por ser antibíblicas… ver esa concordancia me hizo ir aceptándolo hasta el punto de que lo creí total. Pero creo que fue el concepto de Dios presente el que finalmente me hizo sentir que estaba en el camino correcto, no había visto un concepto de Dios tan coherente en ningún otro libro.

Ver también que la fe y la ciencia no estaba peleadas realmente hizo que me tomara muy en serio esta revelación. Tenía hostilidad con ideas tales como la evolución y los registros fósiles, veía que las evidencias científicas chocaban con mis creencias, pero en el fondo sabía que yo estaba mal, pero ver que El libro de Urantia no tenía ese conflicto me llevó a la calma, al ver que ya no existen tales conflictos serios, que la evolución es un hecho, y que Dios y su reino la hicieron posible.

  1. ¿En qué forma El libro de Urantia ha cambiado tu vida?

Cambió mi forma de ver a Dios, a las personas y la realidad, y a su vez me hizo tomar formas de actuar distintas a las que tenía. Me siento libre de hacer cosas que por los tabúes religiosos no podía, me hace feliz por vivir bajo ese liberalismo en donde lo que importa son los motivos reales de uno. Ya no tengo que limitarme a hacer esto o aquello, solo por agradar a una Iglesia o a un concepto de Dios frágil y siempre ofendido.

  1. ¿Ha cambiado la fe que tenías después de leerlo? Si es así, ¿de qué forma?

Prácticamente mi fe pasó de la creencia ciega y temerosa a una fe buscadora y abierta, una fe que en parte duda para crecer y poder corregir lo que está mal en visión e ideología.

  1. ¿Hay algún punto (o puntos) de la revelación que te cueste aceptar?

Al principio tuve problemas con las ideas eugenésicas del libro, mayormente porque tenía en mis manos una tradición no muy buena, pero luego viendo traducciones más correctas y viendo el contexto, el tema es mucho más tolerable, aunque no deja a veces de causar incomodidad, pero hay que entender el contexto de época, que ayuda a entender por qué el libro dice lo que dice y por qué lo dice de esa forma. Pero siempre trato de ver la revelación con los lentes de los valores supremos, eso me ayuda a poder ver las cosas mejor.

  1. ¿Cuál es la parte que más profundamente te ha impresionado?

Creo que el documento final de la fe de Jesús. Poder ver el interior de Jesús me hizo ver cómo debemos ver el mundo. Ese documento te cambia la vida y creo que es uno de los que lleva los conceptos más avanzados del libro. Algunos documentos te sorprenden por la belleza del universo, pero este en particular te sorprende por la bondad y verdad de Dios, por esa visión tan libre de tabúes y juicios apresurados.

  1. ¿Cómo entiendes tú eso de «hacer la voluntad del Padre»?

Para mí implica el gran reto de comprender a los demás, sus motivaciones y contextos, aparte de también uno adaptarse a su propio mundo para poder compartir algo del propio mundo personal. Es difícil y cuesta, pero ese es el gran reto para lograr el estado de divinidad.

A medida que uno interioriza lo que aprendió de El libro de Urantia y experimenta en la vida, uno va viendo los mejores métodos para hacer la voluntad del Padre, uno se da cuenta de que esto va más allá de la búsqueda de nuevos lectores, esto implica también que hay otros mundos y otras fes donde uno puede aportar algo que puede mejorar la fe de esa persona y su propia visión. Creo que implica respetar hasta cierto punto ese otro mundo, y no tratar de forzar a otros a una santidad no lograda.

También creo que dentro de la voluntad de Dios debe haber confianza en Dios, y a su vez dudas honestas, examinadoras y experimentadoras. No dudar de lo central sino de las interpretaciones y formas, siempre lograr que nuestra visión sea idealista pero en un escenario realista, que esos valores supremos de verdad, belleza y bondad sean el norte. Creo que es una forma en donde uno puede crecer, fortalecerse y encontrar las mejores formas para esa religión personal. Constantemente estamos en crecimiento y eso es lo que pide Dios, que al renacer crezcamos y evolucionemos, y no se puede hacer con una creencia ciega en todo lo que implica nuestra creencia.

  1. ¿Has llegado a ser consciente de la presencia de tu Ajustador?

Puedo decir que sí, y la experiencia es como un tirón de oreja, un sentimiento único que golpea el ego. Uno siente luego que necesita más acción y menos lamento por uno mismo. En ese momento uno se da cuenta de que necesita cambiar de estrategia.

  1. ¿Has intentado poner en práctica las enseñanzas del Maestro? ¿Cuál ha sido el resultado?

Cuesta, pero con el tiempo uno ve que son válidas y reales, que el mensaje de Jesús es realmente necesario y útil, y que no son solo frases bellas (así uno las ven la estasis inicial). Tener los ojos de Jesús hace que uno sea menos egoísta, uno logra entender que uno no vive solo para uno mismo, y que salvar egoístamente la vida de uno implica quedarse solo, es corroer el alma con el ácido del egoísmo constante. Al uno usar los lentes de Jesús, uno se toma en serio la regla de oro, pero de una forma que aún es difícil de aceptar. Me doy cuenta de que uno debe hacer por otros lo que quisiera que hicieran por uno, no con la esperanza o expectativa de que será recíproco, sino con la idea central de que me gustaría que así fuera conmigo porque se siente bien.

  1. ¿Crees que El libro de Urantia tiene algo «misterioso» que hace que no todo el mundo se decida a leerlo?

Creo que El libro de Urantia no es para todos, al menos el libro (el mensaje es universal), y por esa razón está en nuestras manos adaptar el conocimiento a los diferentes contextos para que el mensaje llegue. Hay muchas dificultades, como las traducciones o el estilo que impiden que algunos logren captarlo o leerlo a gusto, entonces queda compartir algo de ello de otras formas, tal como lo ha logrado J.J Benítez y su saga de libros. Es cierto que a veces hay que sacrificar algunos conceptos para que la verdad llegue a personas que de otro no lo aceptarían. Tenemos la Simplificación del Prólogo de William Sadler Jr. donde se sacrifican algunos conceptos o se simplifican para que sean entendibles para personas iniciadas, y creo que eso es un acto de empatía. Entonces creo que podemos hacer que el mensaje llegue a más personas y que menos personas se resistan a leerlo (por lo que aparenta ser). Aunque nos debemos preocupar más porque el mensaje llegue que porque el libro sea leído al completo por todos.

  1. ¿Hay algo más que quieras decir respecto a El libro de Urantia?

Quiero compartir tres citas que se han hecho parte de mí y de mi visión, y que también pueden servir a los demás:

153:2.11 (1771.3) la verdad no tiene nada que temer de un examen honrado

48:6.33 (555.1) Pero el fetiche de la verdad factualizada, de la verdad fosilizada, la mordaza de hierro de la llamada verdad inmutable, nos retiene ciegamente en un círculo cerrado de hechos fríos. Es posible tener razón formal en cuanto a los hechos y errar eternamente en cuanto a la verdad.

196:2.9 (2093.3) Jesús hacía que los hombres se sintieran en el mundo como en casa; los liberaba de la esclavitud de los tabúes y les enseñaba que el mundo no es fundamentalmente malo. No anhelaba escapar de su vida terrenal; dominó la práctica de hacer aceptablemente la voluntad del Padre mientras vivía en la carne. Logró una vida religiosa idealista en medio de un mundo realista. Jesús no compartía la opinión pesimista de Pablo sobre la humanidad. El Maestro consideraba a los hombres como hijos de Dios y preveía un magnífico futuro eterno para los que eligieran sobrevivir. No era un escéptico moral; miraba al hombre con ojos positivos, no negativos. Veía que la mayoría de los hombres eran más débiles que perversos, más inseguros que depravados. Pero fuera cual fuera su condición, todos eran hijos de Dios y hermanos suyos.

Acerca del boletín Luz y Vida

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Luz y Vida es el boletín de la Asociación Urantia de España. De 2005 a 2016 se publicó en formato PDF y se distribuía por correo postal y electrónico a la lista de lectores de la asociación, pero actualmente se distribuye en formato boletín (newsletter) a partir de contenido en formato HTML.

Si deseas recibir el boletín en tu correo electrónico, contacta con la asociación para que te suscriban a la lista de destinatarios.

Todos los trabajos y noticias de los lectores y de los grupos de estudio son bienvenidos, así que si deseas compartir algún trabajo secundario, escrito, esquema, imagen, etc., puedes enviarlo a la asociación y lo publicaremos previa evaluación de su idoneidad. Asimismo, la comisión de Comunicación de la junta directiva de la Asociación Urantia de España se reserva el derecho a editarlo para que cumpla unos mínimos de calidad ortográfica.