Películas – Dogma

(Reseña de Olga López)

“Dogma” es una película que se estrenó en 1999 y que dirigió Kevin Smith, un joven director de cine norteamericano que debutó con “Clerks”, una película llena de frescura y humor inteligente. El argumento es un tanto surrealista: dos ángeles cumplen un destierro eterno en Wisconsin y quieren aprovechar una bula papal para que sus pecados sean perdonados y poder volver así al Paraíso, aunque ello supondría el fin de toda existencia, ya que pondría en evidencia que Dios se equivocó e iría por tanto contra el dogma de que Dios es infalible. Para impedir que esto llegue a producirse los poderes celestiales recurren a Bethany, una mujer católica que trabaja en una clínica abortista y que tiene una importante crisis de fe porque la vida no la ha tratado precisamente bien.

Aparte de que la película es tremendamente divertida, y aunque es evidente que está muy condicionada por las religiones actuales, tiene en sus diálogos auténticas “perlas” que coinciden en gran medida con el mensaje de El libro de Urantia. No solo es crítica con el catolicismo, sino también con el resto de religiones. Estas son afirmaciones que se hacen en algunos momentos de la película:

  • Lo importante no es lo que se crea, sino tener fe.
  • Los católicos no viven su fe con alegría: la padecen.
  • La gente no va a misa para sentirse más espiritual, sino por inercia.
  • Todas las religiones han edificado su doctrina sobre la base de una verdad cristalizada en creencias; lo importante es tener ideas que se puedan abandonar si vemos que son ideas equivocadas. Las creencias son mucho más difíciles de dejar.
  • Jesús siempre escuchaba con una sonrisa a sus interlocutores, aunque hablaran sobre temas triviales.
  • Jesús está horrorizado con las atrocidades que se han cometido y se cometen en su nombre.
  • ¿Qué pasó en los evangelios con el período que va desde los 12 hasta los 30 años de Jesús? Esa parte de la vida de Jesús quedó silenciada “en aras de la unidad del cristianismo”.
  • Jesús tenía hermanos y hermanas. Es completamente ilógico que un matrimonio judío del siglo I no tuviera más hijos que Jesús, y que no mantuvieran relaciones sexuales (aunque en la película se deja intacto el dogma de la inmaculada concepción de Jesús, supongo que para no exacerbar los ánimos católicos).
  • Dios tiene un gran sentido del humor (de hecho, en la película se la representa como una mujer que no puede hablar porque su voz haría que saltásemos en pedazos y que una vez al mes toma un cuerpo físico y baja a la Tierra para jugar al tragabolas, su pasatiempo favorito).

Si no habéis visto la película, os la recomiendo. Tiene una serie de “avisos para navegantes” muy interesantes para todo aquél que quiera escucharlos.