Asociación Urantia de España
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Luz y Vida – septiembre 2023

In This Issue

Editorial – septiembre 2023

M. José Sánchez Santamaría

El momento perfecto de sembrar

Septiembre 23-2Una vez más, tras la pausa vacacional, retomamos nuestro boletín Luz y Vida en este mes de septiembre. Además, venimos con la ilusión de poder asistir al primer encuentro presencial nacional tras la pandemia, en Ciudad Real.

En este número de septiembre volvéis a encontrar reflexiones, descubrimientos, materiales de estudio, recomendaciones de vídeos o audios, etc., que esperamos os agraden. Te invitamos, querido lector, a realizar con nosotros un mes más este viaje por El libro de Urantia y sus fascinantes detalles.

Comencemos, pues.

Todos habremos tenido la oportunidad de ver a algún bebé que está aprendiendo a caminar, ¿no? A pesar de caerse una y otra vez en sus intentos por caminar, persiste en este empeño por andar y vuelve a levantarse de forma incansable. Los más pequeños son pura energía y puro aprendizaje. Están descubriendo su propio cuerpo, aprenden sobre la vida material, con sus posibilidades y retos. Todos hemos pasado por esa etapa, que de forma inevitable nos permite conocer y adentrarnos en lo que es la vida en la Tierra, en la materia, en este universo del espacio y tiempo.

No obstante, los adultos hemos seguido aprendiendo, no hemos permanecido en esa fase puramente sensorial y motora de nuestro desarrollo. ¿No hemos seguido progresando? ¿La vida nos arrastra a base de experimentar sensaciones como «ganas de comer esta hamburguesa», «deseo de estar tumbado en el sofá» o «me interesa ver en el móvil todos los shorts posibles»? ¿Actuamos según parámetros primarios, limitados a lo más instintivo, como pequeños animalitos?

En una impactante frase, el maestro de cábala Mario Sabán nos da la clave: o la gente entra al mundo espiritual o se suicida. A estas alturas de la civilización no se puede vivir solo por la materia. ¿El último modelo de móvil me dará la satisfacción en mi vida? ¿Lo hará tal vez el novísimo coche recién comprado en el concesionario, o el viaje a ese sitio tan paradisiaco?  ¿Cuántos coches, casas o iPhones nos van a hacer falta para sentirnos plenos y felices?

Todos sabemos la respuesta. La materia no da más de sí. No le podemos pedir a la materia algo que, en sí misma, no puede dar. Muchas estrellas de cine o cantantes lo han comprobado por sí mismos: llegan al éxito, se alcoholizan, se drogan, se pierden a sí mismas. Podemos preguntarnos: si lo tenían todo, ¿por qué cayeron? Esa es la cuestión: lo tenían todo en la materia y pensaban que ya no podían seguir avanzando más, que ese éxito material o social no daba más de sí. Sin embargo, esas personas insatisfechas no tenían acceso a la parte espiritual en su vida, les faltaba el sentido por el que utilizar la materia, ese instrumento de nuestro crecimiento. La materia debería estar al servicio de nuestro proyecto, del sentido que tiene nuestra vida. Por ejemplo: compro este coche para poder ir al trabajo y ayudar a mis alumnos; no acumulo objetos o dinero sin más, no me aturdo sin fin con sensaciones.

Jesús sabía mantener un buen equilibrio en su vida entre el componente material y el espiritual. Tenía una doble naturaleza y un doble propósito en su vida, que le daba sentido a todo:

Tened siempre presente la doble finalidad del otorgamiento de Miguel en Urantia:

  1. Adquirir la experiencia completa de vivir una vida de criatura humana en carne mortal y culminar su soberanía de Nebadon.

  2. Revelar al Padre Universal a los moradores mortales de los mundos del tiempo y el espacio y llevar más eficazmente a esos mismos mortales a una mejor comprensión del Padre Universal. 128:0.2-4 (1407.2-4)

En nuestro querido Maestro encontramos un magnífico humano que

Trabajó, se cansó, descansó y durmió. Tuvo hambre y la sació con alimentos, tuvo sed y la apagó con agua. Experimentó toda la gama humana de sentimientos y emociones; fue «probado en todo como vosotros»; sufrió y murió. 128:1.2 (1407.7)

Pero que también sabía estar constantemente en la presencia divina, dándole un sentido profundo a su vida:

Incluso mientras luchaba contra la pobreza y trabajaba duramente con sus manos para cubrir las necesidades básicas de su familia, era cada vez más consciente de ser un Hijo de Dios; sabía que era el hacedor de los cielos y de la misma tierra donde estaba viviendo su existencia humana. Y en todo el gran universo que lo observaba, las huestes de seres celestiales sabían también que este hombre de Nazaret era su amado padre-Creador y Soberano. 128:1.13 (1409.3)

El mismo ser que caminaba con sus poderosas piernas por los polvorientos caminos de Galilea afirmaba:

«Yo soy el Alfa y el Omega, el principio y el fin, el primero y el último». 128:1.10 (1408.7)

Qué gran enseñanza la de nuestro Maestro: no rehuía la materia ni la rechazaba, sino que la vivía, la utilizaba para producir un mayor crecimiento y expansión.

Hay muchos ejemplos significativos en El libro de Urantia que nos muestran a Jesús de Nazaret viviendo plenamente la vida material, trayendo la «luz celestial» a la materia y elevándola de esta forma. Por ejemplo: conocemos por El libro de Urantia que él tuvo y mantuvo una familia, y amó profundamente a todos sus miembros. De esta forma nos mostró un gran ejemplo para las familias:

Septiembre 23-3

 

Otro ejemplo: conocía lo sabio que es tener y administrar el dinero como herramienta útil de nuestra vida, aunque también nos advierte de los peligros a los que pueden llegar los que aman las riquezas y codician los bienes fraudulentos.

Mientras trabajó con Zebedeo solo había percibido pequeñas sumas de dinero que enviaba mensualmente a su familia de Nazaret. Unos meses iba José a Cafarnaúm a buscar el dinero y otros pasaba Judá por Cafarnaúm, recibía el dinero de Jesús y lo llevaba a Nazaret. 129:2.1 (1421.6)

Pedro dijo: «Entonces, Señor, ¿quién puede salvarse? ¿Quedarán fuera del reino todos los que tienen riquezas?». Jesús respondió: «No, Pedro, pero todos los que ponen su confianza en las riquezas tienen pocas probabilidades de entrar en la vida espiritual que conduce al progreso eterno. Sin embargo hay muchas cosas imposibles para el hombre que no están fuera del alcance del Padre del cielo; deberíamos reconocer más bien que con Dios todo es posible». 163:3.2 (1803.4)

 

Septiembre 23-4

Pero sigamos profundizando un poco más en este tema y sus repercusiones en los lectores de El libro de Urantia. Actualmente en Occidente observamos que, a grandes rasgos, existe cierta tensión entre dos planteamientos acerca de la materia y cómo vivir en ella.

Si observamos las filosofías orientales tan en boga, tienden a buscar la elevación o ir hacia la luz dejando atrás la materia, los deseos o apegos. Krishamurti, el sabio hindú, hablaba precisamente de renunciar a la mente racional, pues nos puede engañar, y debemos salir de las ataduras de la materia o la carne en la mente.

Por otro lado, en Occidente estamos rodeados del planteamiento materialista del marxismo y el capitalismo, unas cosmovisiones puramente materiales que entienden que todo en la vida son deseos materiales o de la carne, sin trascendencia alguan.

¿Debemos huir, rechazar la materia y sus apegos, como propugna por un lado Oriente? ¿O mejor sería vivir todos los deseos materiales, pues es lo único que existe realmente?

No nos confundamos: ni todos los deseos son puramente materiales (como afirman unos) ni todos los deseos son apegos (como dicen otros). Realmente la mayoría de los deseos no son materiales, aunque se pueden «tapar» con materia, pues son deseos del alma.

Imaginemos esta situación: una señora entra en una zapatería y se compra un zapato; luego 2 más, después sigue comprando 3 pares más, así hasta 40 pares, luego llega a los 50 pares. ¿Ya estará satisfecha la señora en ese momento? ¿Ese consumo excesivo ha dado respuesta al deseo de su alma de sentir la belleza en sí misma?

Lo que nos enseña el Maestro es la búsqueda del equilibrio en la vida. No se trataría de elevarnos hacia la luz, rechazando la materia, o de vivir solo desde los sentidos y los instintos. Se trataría de traer a la Tierra, a nuestro planeta, a la materia, el reino de los cielos, tal como dice el Padrenuestro:

Que venga tu reino; que se haga tu voluntad
En la tierra como en el cielo. 144:3.5-6 (1620.3-4)

Somos, sin ninguna duda, seres viviendo la experiencia de la materia:

El hombre es una criatura del suelo, un hijo de la naturaleza; por mucho que se esfuerce por escapar de la tierra, al final tiene el fracaso asegurado. Es literalmente cierto para toda la humanidad que «polvo eres y al polvo volverás». 68:6.1 (769.6)

Pero no solo estamos hechos de materia: al mismo tiempo somos seres espirituales. Esta dualidad en nuestra vida es inevitable y está planificada para nuestro bien, para el mejor bien del universo:

En todo mortal existe una naturaleza dual: la herencia de las tendencias animales y el alto impulso de la dotación espiritual. Durante la corta vida que vivís en Urantia, estos dos impulsos distintos y opuestos rara vez se pueden conciliar del todo, difícilmente se pueden armonizar y unificar. Pero a lo largo de toda vuestra vida, el Espíritu combinado os asiste siempre para ayudaros a someter cada vez más la carne a la guía del Espíritu. Aun cuando debéis vivir vuestra vida material por completo, aun cuando no podéis escapar del cuerpo y sus necesidades, tenéis sin embargo, en propósito y en ideales, cada vez más poder para someter la naturaleza animal al dominio del Espíritu. Existe verdaderamente dentro de vosotros una conspiración de fuerzas espirituales, una coalición de poderes divinos, cuyo propósito exclusivo es liberaros finalmente de la esclavitud material y los impedimentos finitos. 34:6.9 (381.3)

Septiembre 23-1

La importancia que da nuestro Creador a la materia, a vivir nuestra vida en ella, nos debe hacer reflexionar. ¿Para qué nos sirve la materia ahora?

A nivel de civilización, nos ha servido para tener cada vez más tiempo. Por ejemplo: si mis bisabuelos no tenían nevera, tenían que dedicarse a salar las comidas, hacer encurtidos, embutidos, etc., algo que requiere su tiempo. O si mi tatarabuela no tenía lavadora, debía ir al río y dedicar bastante tiempo a lavar sábanas, ropas, pañales, etc. La tecnología nos ha servido, pues, para tener actualmente mucho tiempo libre.

Y ahora ¿qué podemos hacer? Somos la primera generación que tenemos el gran privilegio de tener mucho tiempo disponible, pero también tenemos mucho vacío existencial, producto precisamente del tiempo libre del que disponemos. Muchos antepasados nuestros lucharon para conseguir que en este momento de la civilización una generación tuviera tanto tiempo disponible (para estudiar, desarrollarnos, expandirnos) y, ahora que tenemos tanto tiempo libre, la gente no sabe qué hacer con él: viaja por todas partes del mundo, juega con videojuegos, etc. Se busca la diversión, pero cuando esta llega a un nivel se produce un hastío o aburrimiento de esta diversión.

Disponemos de tiempo libre gracias a la tecnología y tenemos tiempo para meditar sobre la realidad del universo, por ejemplo. Nuestros antepasados, en cambio, trabajaban horas en el campo, en la limpieza o en la cocina. No disponían de tiempo para meditar sobre el sentido de la vida o la realidad, solo algún monje en un monasterio tenía antes ese privilegio de estudio y reflexión. Esta generación que dispone de bibliotecas enteras, acceso inmediato a través de Internet, ahorro de tiempo con la tecnología… ahora, curiosamente, vive en un vacío existencial.

La medicina y los avances tecnológicos también han hecho que podamos vivir más tiempo. Por primera vez en la historia encontramos a personas de 60 años que pueden tener una esperanza de vida mayor, pueden tener 20 o 30 años por delante. ¿Qué pueden hacer ahora cuando se jubilen? ¿Qué van a hacer entonces con tanto tiempo? Lo deberíamos aprovechar muy bien, pues durante siglos nuestros antepasados trabajaron sin parar con el fin de conseguir este logro actual del que disfrutamos. Durante generaciones, la humanidad debía luchar por la subsistencia, pero ahora no estamos en esas condiciones de lucha diaria por la supervivencia como para estar ocupados nada más que por las cosas materiales. Llega el momento histórico y crucial en el que ya no se puede huir más del alma, de la espiritualidad. La materia ya no da más de sí: necesitamos vivir con sentido nuestra vida, necesitamos algo con profundidad, con fondo, en nuestra vida.

Ahora es el momento de poder mostrar al mundo las enseñanzas inigualables de nuestro amado Creador y Maestro. Esas enseñanzas pueden llenar el vacío existencial actual y dan sentido a nuestra vida. Los lectores de El libro de Urantia tenemos terreno fértil alrededor, como nuevos sembradores, a imagen de aquella antigua parábola que Jesús de Nazaret expuso sobre una barca. Y como aquel sembrador, tendremos obstáculos y problemas, pero no importa, pues como decía Tomás en su interpretación de ese cuento, no tenemos control sobre todas las cosas:

Jesús asintió con un gesto, y Tomás dijo: «Hermanos, no quisiera prolongar esta discusión, pero si así lo deseáis, os diré que pienso que esta parábola fue dicha para enseñarnos una gran verdad. Y es que, por mucho que nos esforcemos en ejecutar nuestra misión divina con eficacia y fidelidad, el éxito de nuestra enseñanza del evangelio del reino será muy variable, y que todas estas diferencias de resultado serán consecuencia directa de las condiciones inherentes a las circunstancias de nuestro ministerio, condiciones sobre las que tenemos poco o ningún control». 151:2.6 (1691.1)

Respondamos a la esperanza de tantas generaciones que lucharon y sufrieron por conseguir este momento actual: tiempo para desarrollarnos espiritualmente en este universo material. Ahora es el momento perfecto para sembrar.

Septiembre 23-5

Trabajos – nuestras recomendaciones del mes

El Ajustador y la experienciaEl Ajustador y la experiencia (varios autores)

Antes de que hubiera grupos de estudio presenciales, había lectores que planteaban preguntas a otros amigos lectores por correo electrónico que daban lugar a interesantes conversaciones a varias bandas. Este grupo incluso llegó a tener un nombre, GEI (Grupo de Estudio por Internet), y esta es la recopilación de una de esas conversaciones, que comenzó con las preguntas de uno de los participantes: «¿cómo es posible que si Dios es todopoderoso y ha depositado un fragmento suyo en cada uno de nosotros ese ajustador que mora en nosotros no tenga experiencias? Entonces ¿qué nos puede aportar? o ¿para qué las quiere? Y si es así, ¿para qué las necesita, si es un fragmento de Dios? No llego a comprender para qué acumula experiencias de unos seres que están empezando a tenerlas».


CreerCreer (José Alberto Wonsover)

En este revelador escrito, su autor nos habla de que no solo es importante querer cambiar, sino dar pasos en la dirección correcta. Como muy bien dice: «son muchos los seres humanos que dicen querer madurar y hallar la libertad interior y hacer algo al respecto, pero que se han acostumbrado a su jaula interna y no quieren abandonarla». ¿Y cómo conseguimos abandonar esa jaula interior? Por medio de la experiencia. Nos dice José Alberto: «hacer algo para alcanzar algo requiere esfuerzo y una lucha interminable, pero esa meta ya está en nosotros. El Padre está en nosotros.» ¿Cómo no vamos a conseguirlo?


La vida interior: hacia DiosLa vida interior: hacia Dios (Olga López)

En esta presentación, la autora comienza diciendo lo siguiente: «Una vida interior rica pasa por espiritualizarnos, por alejarnos de las tendencias materiales y animales de la mente. ¿Y qué mejor manera de hacerlo que acercándonos a la fuente de todo lo que es espíritu?». Y a continuación se pregunta: «¿Cómo nos elevamos espiritualmente, nosotros los mortales de carne y hueso? ¿Cómo pasamos de ser animales racionales a ser todo lo perfectos que podemos ser en el nivel finito de la realidad? A diferencia de los nativos de Havona, no nacimos perfectos, luego tenemos que aprender a serlo. ¿Y cómo aprendemos?». Acompañen a la autora por el camino que va desde lo material hasta lo espiritual, hacia la fuente de Todo y de todos: Dios Padre.


La personalidadLa personalidad (Jacques Dupont)

Aun siendo consciente de que la personalidad es, en palabras de los reveladores, «uno de los misterios no resueltos de los universos», y teniendo en cuenta que también nos dicen que una revelación completa no sería muy deseable pues ahogaría nuestra imaginación, el autor se lanza al intento de definir la personalidad y presentar sus características básicas. Este es un trabajo muy interesante para tener una idea más o menos aproximada de lo que supone tener el don de la personalidad y el libre albedrío asociado a ella.

 

Historia y enseñanzas: Crónica de la vida de Jesús

Documento 147RELATO PERIODÍSTICO DE LA VIDA Y ENSEÑANZAS DE JESÚS SEGÚN EL LIBRO DE URANTIA

Os presentamos la siguiente entrega de las crónicas de la vida de Jesús, que en esta ocasión contiene lo que nos cuentan los reveladores en el documento 147 (El paréntesis de la visita a Jerusalén). Dentro del PDF veréis un botón desde donde acceder al texto del documento desde el sitio web de la Fundación Urantia.

Resumen del documento 147

Guía de El libro de Urantia para niños: José y María encuentran a Jesús y regresan a casa

José y María encuentran a JesúsContinuamos repasando el trabajo secundario Una guía infantil hacia El libro de Urantia, de Mary Livingston. Este es el siguiente capítulo, que trata sobre los momentos en los que José y María encuentran a Jesús y regresan a casa, y comienza así:

«Parecía que Jesús se había olvidado de papá y mamá. Cuando el papá de Lázaro se hallaba cerca de ellos, Jesús no parecía sentir que ellos estuvieron preocupados.

»Los maestros y los líderes del templo estaban sorprendidos de los conocimientos de Jesús. Él conocía las escrituras en hebreo y en griego, pero lo que más les llamaba la atención era su juventud. Cuando la gente comenzó a hablar sobre las oraciones, los maestros le dijeron a Jesús que se sentara con ellos. Le pidieron que hablara y que enseñara como ellos.»

Descarga del capítulo completo en formato PDF

Otros libros de crecimiento espiritual

El tesoro del auténtico éxito y felicidadEl tesoro del auténtico éxito y felicidad. Un mensaje de tu dios interno (José Joaquín Llinares Nadal)

Este es un breve ensayo escrito por un lector del libro, psicólogo y pintor, que define así esta obra: «Este no es un libro religioso. Es un libro sobre la autoestima, cuya pretensión es el reconocimiento del auténtico potencial intrínseco que dormita en el corazón del individuo, pues el único dueño del poder capaz de recuperar la auténtica autoestima, el auténtico éxito y felicidad, el verdadero tesoro que enriquece la vida, es uno mismo. En el ser humano, a pesar de su estado presente, a pesar de las circunstancias que viva, se encuentra el bagaje que requiere para armonizar su vida, sonreír y danzar con ella».

Audio recomendado

El datoEl dato, de José A. Rodríguez Jorge (Espacio «Luz y Vida» de Radio Urantia)

En esta entrega del espacio «Luz y Vida» de Radio Urantia, su autor, José Antonio, comienza diciendo que la primera vez que leyó El libro de Urantia tenía la impresión de no estar entendiendo nada, y que podía caer en el error de centrarse solo en los datos. Lo importante es que tengamos claro que Dios existe y es el Arquitecto del universo, y que el ser humano trasciende la naturaleza material. No se trata de ser eruditos de los conocimientos del libro, sino conocedores de las verdades sencillas de la fe.

Enlace: https://www.ivoox.com/dato-jose-a-rodriguez-jorge-prog-audios-mp3_rf_76798283_1.html

Navegando por la vida: Tres deseos

Tres deseosUn pescador humilde y reflexivo se encontró un día con un genio.

—¡Eres mi salvador! —dijo el genio— Hacía mucho tiempo que estaba aquí aburrido en el fondo del mar. ¡Muchas gracias! Te concederé tres deseos por haberme liberado. ¿Cuál es tu primer deseo?

Sorprendido, el pescador respondió, al cabo de un momento:

—Me gustaría que me hicieras lo bastante inteligente, esclarecido y sabio para hacer un buen uso de los dos deseos que me quedan.

—¡Concedido! —exclamó el genio con un chasquido de dedos— Ahora dime, ¿cuáles son tus otros dos deseos?

El pescador reflexionó un momento y respondió con serenidad:

—Muchas gracias, no tengo más deseos.

Mi párrafo favorito

Mayra Moreno

Mi párrafo favorito - sep 23Como a la mayoría de los lectores de El libro de Urantia, la cuarta parte es una de mis favoritas. Jesús, nuestro Padre Creador, Maestro y hermano, nos liberó de las cadenas de las religiones evolutivas, vino a enseñarnos el amor del Padre Celestial. Jesús debe ser para nosotros una inspiración a seguir. Dentro de nuestra imperfección, podemos ser perfectos como Él. Me lo puedo imaginar a través de la descripción que nos dan en el párrafo siguiente:

El Maestro mostró una gran sabiduría y una perfecta equidad en todos sus tratos con los apóstoles y con todos sus discípulos. Jesús era realmente un maestro de hombres. Ejercía una gran influencia sobre sus semejantes por la combinación de fuerza y encanto de su personalidad. De su vida dura, nómada y sin hogar emanaba una sutil actitud de mando. Había atractivo intelectual y poder de convocatoria espiritual en la autoridad de su manera de enseñar, en su lógica lúcida, en la fuerza de su razonamiento, en su visión interior sagaz, en su mente despierta, en su aplomo incomparable y en su tolerancia sublime. Era sencillo, varonil, honrado e intrépido. A toda esta influencia física e intelectual patente en la presencia del Maestro, se sumaban todos los encantos espirituales que se han asociado a su personalidad: la paciencia, la ternura, la mansedumbre, la dulzura y la humildad. 141:3.4 (1589.5)

En su discurso de despedida encuentro fuerzas y una gran esperanza que me ayuda en mi diario vivir, hasta que la última hoja de mi calendario se caiga. He aquí algunos de mis párrafos favoritos:

Por eso os doy un nuevo mandamiento: que os améis los unos a los otros como yo os he amado. Y si os amáis así los unos a los otros, en eso conocerán todos que sois mis discípulos. 180:1.1 (1944.4)

«Cuando os invito a que os améis los unos a los otros como yo os he amado pongo ante vosotros la medida suprema del verdadero afecto, pues nadie tiene un amor mayor que el que da la vida por sus amigos. Vosotros sois mis amigos, y seguiréis siendo mis amigos si estáis dispuestos a hacer lo que os he enseñado. Me habéis llamado Maestro, pero yo no os llamo siervos. Solo con que os améis los unos a los otros como yo os amo seréis mis amigos y siempre os hablaré de lo que el Padre me revela. 180:1.3 (1944.6)

«No solo me habéis elegido vosotros a mí sino que yo también os elegí a vosotros, y os he ordenado para que salgáis al mundo a servir a vuestros semejantes por amor igual que yo he vivido entre vosotros y os he revelado al Padre. El Padre y yo trabajaremos con vosotros y vosotros experimentaréis la plenitud divina de la alegría solo con que obedezcáis mi mandamiento de amaros los unos a los otros como yo os he amado.» 180:1.4 (1945.1)

La vid y las ramas

«Yo soy la vid verdadera y mi Padre es el viñador. Yo soy la vid y vosotros los sarmientos, y el Padre solo me pide que deis muchos frutos. La vid solo se poda para que sus sarmientos produzcan más. Todo sarmiento que sale en mí y no dé fruto, el Padre lo cortará. Todo sarmiento que dé fruto, el Padre lo limpiará para que dé más fruto. Vosotros ya estáis limpios por la palabra que os he hablado pero debéis seguir limpios. Permaneced en mí y yo en vosotros. El sarmiento muere si se separa de la vid. Como el sarmiento no puede dar fruto si no permanece en la vid, tampoco vosotros podéis dar los frutos del servicio por amor si no permanecéis en mí. No olvidéis que yo soy la vid verdadera y vosotros los sarmientos vivos. El que vive en mí y yo en él dará muchos frutos del espíritu y experimentará la alegría suprema de producir esa cosecha espiritual. Si mantenéis esta conexión espiritual viva conmigo daréis frutos abundantes. Si permanecéis en mí y mis palabras viven en vosotros podréis comulgar profusamente conmigo, y entonces mi espíritu vivo se infiltrará en vosotros de tal forma que pediréis todo lo que mi espíritu desea y lo haréis con la seguridad de que el Padre nos concederá nuestra petición. El Padre es glorificado cuando la vid tiene muchos sarmientos vivos y cada sarmiento da muchos frutos. Y cuando el mundo vea estos sarmientos llenos de fruto —mis amigos que se aman los unos a los otros como yo los he amado— todos los hombres sabrán que sois en verdad discípulos míos. 180:2.1 (1945.4)

«Como el Padre me ha amado os he amado yo. Vivid en mi amor como yo vivo en el amor del Padre. Si hacéis lo que os he enseñado permaneceréis en mi amor igual que yo he guardado la palabra del Padre y permanezco eternamente en su amor.» 180:2.2 (1945.5)

La enemistad del mundo

«No os dejaré solos en el mundo. Cuando me haya ido os enviaré enseguida a un ayudante de espíritu. Tendréis a alguien que ocupará mi lugar entre vosotros, que os seguirá enseñando el camino de la verdad y que incluso os confortará. 180:3.3 (1947.2)

«No se turbe vuestro corazón; creéis en Dios, creed también en mí. Aunque tengo que dejaros no estaré lejos de vosotros. Ya os he dicho que en el universo de mi Padre hay muchas moradas. Si esto no fuera verdad no os habría hablado tantas veces de ellas. Voy a regresar a esos mundos de luz que son estaciones en el cielo del Padre a las que vosotros ascenderéis algún día. Desde esos lugares vine a este mundo, y ahora está próxima la hora en que debo volver al trabajo de mi Padre en las esferas de lo alto.» 180:3.4 (1947.3)

Cuestionario urantiano – Julieta Quintero

Julieta QuinteroMe llamo Julieta Quintero, soy venezolana y tengo un hijo de 26 años.

  1. ¿Cómo llegaste hasta El libro de Urantia y por qué crees que lo encontraste?

Vi una entrevista a J.J. Benítez donde le preguntaron si creía que El libro de Urantia era una verdadera revelación, y él contestó que sí lo era. Así que descargué el PDF y empecé a leerlo.

¿Por qué lo encontré? Quiero creer que forma parte del plan de mi Ajustador.

  1. ¿Cuál fue tu primera impresión al leerlo?

Fue como ponerme unos lentes de realidad, me impresionó y me hizo feliz al mismo tiempo. La impresión de saber que tienes delante una tarea titánica y eterna de crecimiento a la realidad y al encuentro de nuestro Padre, y la alegría por saber que cuentas con una gran familia universal que te guía y te anima desde el otro lado para ayudarte en el eterno camino.

  1. ¿En qué punto de la lectura (documento, frase, etc.) aceptaste que El libro de Urantia es realmente lo que dice ser?

No fue un punto o evento; ha sido un proceso de entendimiento de sus verdades que me ha llevado a aceptarlo y seguir entendiendo.

  1. ¿En qué forma El libro de Urantia ha cambiado tu vida?

Aunque la vida sigue estando llena de conflictos, en mi mente ya no hay tanto drama. Abordo los problemas con más serenidad. Me quité el traje de víctima. Creo que me ha puesto en el inicio del camino a la madurez.

  1. ¿Ha cambiado la fe que tenías después de leerlo? Si es así, ¿de qué forma?

Se ha fortalecido mi fe, porque me confirma todo el trabajo de impulso espiritual que sentía dentro de mí y no entendía.

Sabía que estábamos habitados por un Dios, pero no sabía su mecanismo y mucho menos que trabajaba en equipo con el Espíritu de la Verdad, el Espíritu Santo y sus siete ayudantes de la mente. Que, aparte de ese equipo interior, se complementa con otros seres que trabajan desde fuera como los ángeles, seres intermedios, etc., para guiarte en todo momento. Y que solo necesitas despertar, estar atento a tu equipo. Un equipo soñado.

  1. ¿Hay algún punto (o puntos) de la revelación que te cueste aceptar?

Más que aceptar, es no entender algunas cosas, como por ejemplo:

  • La omnisciencia de Dios que ve pasado, presente y futuro.
  • La no existencia del tiempo y del espacio en el Paraíso.
  • Por qué Jesús tuvo que ser asesinado tan cruelmente.
  • El sufrimiento en general.

Pero ya no peleo con ellas, solo pido al Espíritu de la Verdad que me ayude a entenderlas.

  1. ¿Cuál es la parte que más profundamente te ha impresionado? 
  • Lo profundamente dormidos que estamos los humanos frente a la inmensidad del Padre Universal, su familia y su proyecto.
  • Que nuestro querido Jesús sea el Dios de un universo y nuestro Padre Creador. 
  1. ¿Cómo entiendes tú eso de «hacer la voluntad del Padre»?

Para mí, hacer la voluntad del Padre es estar atenta a todo lo que ocurre en mi interior y exterior. El plan del Ajustador está en marcha, todo lo que sucede dentro y fuera de mí está diseñado para mi crecimiento espiritual.

Cada vez que logro detener mi flujo mental desbocado y estar presente a lo que ocurre, puedo responder mejor a su plan, a su voluntad.

Estoy consciente de que él quiere que comparta mi vida interior con él y me impulsa a eso.

También es tener claro lo que eres, tu condición dual. A veces tu materialidad se inclina más, lo que te lleva a cometer múltiples errores, lo cual está bien si te das cuenta y tratas de corregirlos. Dicen los documentos que lo importante es lo que tratas de hacer.

  1. ¿Has llegado a ser consciente de la presencia de tu Ajustador?

Sí, el Padre vive en mí. Habla con una mezcla de sentimiento, paz y certeza.

10. ¿Has intentado poner en práctica las enseñanzas del Maestro? ¿Cuál ha sido el resultado?

Sí, lo intento. Sueño con llegar a tener el autodominio y fe que Jesús mostró aquí. No todas las veces lo logro, pero no desisto de intentarlo.

Escuchar y ayudar al prójimo siempre. Practicar más seguido el humor, sacar una sonrisa en situaciones estresantes alivia las tensiones.

¿Resultados? La mayoría de las veces creo que lo hago bien. En algunas ocasiones me va fatal, de repente me vuelvo egoísta y me pierdo, así que mi parte material todavía pesa mucho. Es un ir y venir.

11. ¿Crees que El libro de Urantia tiene algo «misterioso» que hace que no todo el mundo se decida a leerlo?

No creo que tenga nada misterioso que impida leerlo, solo que aún el libro no se ha hecho viral. Es un conocimiento nuevo, y sabemos que toma tiempo desplazar ideas viejas en las mentes. Aparte de eso, la robustez del libro en papel es abrumador para algunas personas.

Si se hace una campaña masiva de márquetin a nivel mundial, con deportistas reconocidos y gente muy famosa, seguro que se multiplicarían los lectores, pero tengo entendido que ese no es el camino a seguir.

Lo que hacen los lectores hoy día, dosificar la información en las redes sociales con grupos de estudio, vídeos, audios, historias, infografías, boletines, radio, imágenes con citas de los documentos, etc., son pequeños guiños que se le hacen a la mente de las personas. Apuntan a atraer a los buscadores y dar apoyo a lo que presienten y no comprenden en su interior. Es una pequeña carnada para acercarlos a la revelación, va paso a paso.

Todo sin olvidar el ejemplo que todos los lectores comprometidos deben dar al prójimo en su día a día. Me gusta la frase: están ayudando a Jesús, al jefe, a despertar a las personas.

12. ¿Hay algo más que quieras decir respecto a El libro de Urantia?

Es una ventaja estudiar El libro de Urantia y a la vez una gran responsabilidad, contigo mismo y con el Padre. Es un todo o nada. Es ir más allá de conocerlo, de integrar sus enseñanzas, de creértelo, de pasar revista a tu mente y comportamiento diariamente, autoconquistarte. Es saber que cada pequeña cosa que te sucede y que compartes con Dios es la comunión con Él, la religión de la experiencia personal.

Nuevos cursos de la Escuela Internacional de El libro de Urantia (UBIS)

Cursos UBIS septiembreEn septiembre comienza un nuevo trimestre de cursos en la Escuela Internacional de El libro de Urantia (UBIS por sus siglas en inglés). El periodo de inscripción comienza el lunes 11 y finaliza el domingo 24. Los cursos comienzan el lunes 18 con la semana de orientación.

Estos son los cursos que se ofrecerán este trimestre:

  1. El regocijo de hacer la voluntad del Padre. Facilita: Luis Alfonso Rojas Rosillo. Nivel: intermedio. Duración: 10 semanas.
  2. Las serafines: conociendo y amando a nuestras ángeles. Facilita: Ana Eguren. Nivel: básico. Duración: 10 semanas.
  3. La religión como experiencia personal con Dios. Facilita: Fanny Yuliana Chuquilin. Nivel: básico. Duración: 10 semanas.
  4. Rodan de Alejandría: filosofía en tiempos de Jesús. Facilita: Diego Betancourt. Nivel: básico. Duración: 10 semanas.
  5. La experiencia interior de Jesús, el hombre. Facilita: Jimmer Prieto. Nivel: intermedio-avanzado. Duración: 10 semanas. Formato grupo de estudio.

Si estáis interesados en solicitar algún curso, previamente debéis crear una cuenta en la web de la escuela, http://ubis.urantia.org. Esto puede hacerse antes de que comience la inscripción.

Los cupos son limitados, ¡así que inscribíos lo antes posible!

Para obtener más información sobre los cursos, podéis visitar esta página: https://www.urantia.org/es/education/programacion-de-cursos

 

Acerca del boletín Luz y Vida

Logo AUE

Luz y Vida es el boletín de la Asociación Urantia de España. De 2005 a 2016 se publicó en formato PDF y se distribuía por correo postal y electrónico a la lista de lectores de la asociación, pero actualmente se distribuye en formato boletín (newsletter) a partir de contenido en formato HTML.

Si deseas recibir el boletín en tu correo electrónico, contacta con la asociación para que te suscriban a la lista de destinatarios.

Todos los trabajos y noticias de los lectores y de los grupos de estudio son bienvenidos, así que si deseas compartir algún trabajo secundario, escrito, esquema, imagen, etc., puedes enviarlo a la asociación y lo publicaremos previa evaluación de su idoneidad. Asimismo, la comisión de Comunicación de la junta directiva de la Asociación Urantia de España se reserva el derecho a editarlo para que cumpla unos mínimos de calidad ortográfica.